Quinta da Azenha es una explotación de producción de pollos “campestres” que cuenta con cuatro pabellones. Funciona con un sistema de monitorización y control ambiental, además de básculas de silos que permite un análisis detallado de los datos.
Marco Barros, Director General de Interaves, explica «La producción animal es hoy una actividad en constante evolución científica y tecnológica, buscando siempre la optimización de los costes de producción, teniendo en cuenta que estamos en mercados cada vez más competitivos y cada vez más a nivel internacional. A la vista de estos hechos, y siendo intención de las empresas valorar y valorizar sus productos, es importante encontrar herramientas que permitan un seguimiento riguroso de las producciones a través del control, pero sobre todo del registro y seguimiento de todos los datos que puedan influir negativamente o positivamente índices técnicos y, en consecuencia, económicos de sus producciones animales «.
El próximo mes, conoceremos el proyecto Socampestre y la importancia de un sistema de seguimiento y control en los distintos puntos de la cadena de producción.